24 de marzo de 2014

Buques de YCF y B/T

No fue menor la contribución esforzada y patriótica que con motivo de la recuperación de Malvinas tuvo la Empresa Nacional Yacimiento Carboníferos Fiscales a través de sus barcos: Ceibo, Yaham y Santa Cruz.

Esta flota, venerable y veterana, intervino en el transcurso total de la guerra de Malvinas, transportando todo tipo de materiales para nuestras Fuerzas Armadas, municiones, repuestos, etc., incluido combustibles para la Fuerza Aérea y Armada Argentina. Dichos barcos efectuaron navegaciones durante todo el período del conflicto bélico con Gran Bretaña fuera del mar territorial ( 12 millas de la costa) cumpliendo las derrotas “SARA” (mas alejada de la costa) y “LIDIA” (cercana la costa) ordenadas por la Armada Argentina y de acuerdo a las condiciones hidrometeorológicas. Por supuesto navegaban sin armamento y sin ningún tipo de protección o escolta, en sigilosa, total silencio de radio y radar, con los ojos de buey pintados de negro y listos para arrojar al mar una bolsa lastrada y agujerada para fondear las claves y oros documentos en caso de ser abordados o atacados.


Estos barcos junto con sus tripulaciones se distinguieron no solo por su valentía en atravesar aguas contaminadas de submarinos enemigos y otros peligros, sino también en el estricto cumplimiento de su labor específica en bien de los habitantes de nuestro país pues pese al agravamiento progresivo de las acciones bélicas los mismos continuaron ininterrumpidamente con la misión de transportar carbón y proveer energía vital a las centrales eléctricas de Buenos Aires y San Nicolás de los Arroyos.

Efectivamente el Ceibo al mando del capitán de ultramar Carlos Amor secundado por el 1er. Oficial Jorge Rivas Meneclier, además de sus tareas de abastecimiento de material energético, emprendió, sorteando innumerables peligros, numerosos viajes de aprovisionamiento a puertos patagónicos y traslado de materiales estratégicos para las Fuerzas Armadas.

Otro tanto ocurrió con el Yaham (en lengua tehuelche, “Madre Tierra”), un buque motor de 6.500 toneladas de carga,  que tuvo alternativamente como comandantes a los capitanes de Ultramar D. Marcos Castro, Félix Nicolini y Juan Doyle. Esta nave contó además, dentro de su Plana Mayor, con el Jefe de Cubierta Carlos Geddes y los primeros oficiales Luis Escobio y Victorio Kudacki, el Oficial de Máquinas Rubén Porrez y en calidad de Jefe de Radiocomunicaciones el Oficial Jefe, Raúl Patiño. Este último oficial iba a ser un elemento valiosísimo dentro del plantel de la unidad pues además de ser capitán de corbeta de la Reserva Naval, con ocho años dentro de la Armada, tenía experiencia en las operaciones de comunicaciones navales, tareas de inteligencia radial, cifrado y descifrado de material criptográfico.

Este barco el día 23 de abril de 1982 transportó materiales militares al Puerto de Río Gallegos, desde donde luego partió para llevar carbón a los puertos de Buenos Aires y San Nicolás. Este periplo de norte a sur y viceversa se repitió y en ocasión de encontrarse en Río Gallegos, por mandato de Prefectura Naval, fondearon en la rada exterior (mar abierto) para iniciar una vigilancia con radar-con todas las luces apagadas, en sigilosa- con objeto de detectar gomones de desembarco con los cuales, según informaciones, el enemigo trataría de llegar a nuestras costas para atacar las posiciones del lugar.

Sin perjuicio de ello cada vez que el Yaham se encontraba en Río Gallegos los tripulantes del mercante solían pasar algunos víveres a los Avisos de la Armada que patrullaban las costas y operaban entre las islas y el continente.

El deseo de participar más activamente en la patriada reivindicatoria de nuestra soberanía llevó al primer oficial Kudacki a presentarse, el 10 de junio, en el Edificio Guardacostas para ir de voluntario a las islas y luchar junto a los hombres de Prefectura Naval, por los cuales, en base a su destacada actuación, sentía una honda admiración y orgullo.

El buque Santa Cruz, estuvo al mando del Comodoro de la Flota de Y.C.F. el Capitán de Ultramar D. Pedro Juan Gaudiero.

Como una reafirmación de la meritoria labor que estos barcos de Y.C.F. cumplieron durante el transcurso de toda la contienda bélica el Comandante Naval de Tránsito Marítimo, Capitán de Navío Emilio Osses, el día 25 de junio de 1982, envió una nota oficial al Presidente de la Empresa Yacimientos Carboníferos Fiscales, D. José Ituruza, redactada en los siguientes términos: “Tengo el honor de dirigirme al Señor Presidente a efectos de solicitarle tenga a bien hacer llegar a los Señores Capitanes Mercantes de esa Empresa, Pedro Juan, Félix Nicolini, Juan Doyle, Marcos Castro y Carlos Amor, nuestro cabal reconocimiento por el desempeño que les cupo durante el reciente conflicto bélico con Gran Bretaña, en la conducción de sus unidades en el mar.”


BUQUES TANQUE (BT)
       Si bien el empleo de buques tanques para servicio de la Flota de Mar tuvo sus referentes en los comienzos de siglo con un único componente, el ARA Ministro Escurra, esta actividad se vio posteriormente reforzada  a partir de 1946 con la compra de nuevas unidades (seis en total) que terminaron por conformar en 1950 un núcleo de modernos BT para nuestra Armada. Los últimos cuatro buques tanque adquiridos en Estados Unidos y Gran Bretaña, entre ellos el Punta Médanos agregaron una nueva capacidad a la Flota de Mar, y lo que hoy es un hecho de rutina, para ese entonces resultó una novedad: poder hacer petróleo en el mar, o dicho en otras palabras, poder reabastecer las unidades de combate navegando a la par del buque “nodriza” o buque “madre”. La primera vez que se efectuó esa maniobra –con carácter experimental- fue entre los BT ARA  Punta Delgada y ARA Punta Loyola, en noviembre/ diciembre de 1949 durante su viaje de venida al país y la Flota de Mar lo efectuó en forma práctica cuando el ARA Entre Ríos recibió combustible del “BT” ARA (Punta Ninfas), el 8 de abril de 1950.
       Fue a partir de 1954 en ejercitaciones de la Flota de Mar (conjuntas con el Ejército Argentino o combinadas con fuerzas navales extranjeras) donde se vio entre otros temas, la escolta y protección de un convoy integrado por buques de la Marina Mercante Argentina (ELMA) y buques tanque de YPF, cuyos componentes participaron de los operativos en aguas atlánticas.

       A contar de allí, los diversos ejercicios navales de carácter nacional (Foca, Caimán, Biguá, Neptuno) como los que incluían a unidades de las Armadas de países Americanos (Unitas) y así también los combinados con unidades asiáticas y europeas, (Mare Nostrum, Royal, Navy, Sayonara, etc.) siempre contaron con la concurrencia de buques tanque argentinos cuyas dotaciones adquirieron una enorme experiencia. Este conocimiento, notablemente ampliado por los cursos que sobre tal especialización dictó la Armada Argentina a las tripulaciones mercantes y propias tuvo su aplicación práctica en un conflicto real durante la conflagración sudatlántica de 1982.

       La participación de buques tanque en el conflicto de Malvinas otorgó a los distintos despliegues de nuestra Flota de Mar, una mayor flexibilidad en el tren logístico, brindando, según su empleo, una posibilidad más en la opción de desplazamientos y permanencias activas en el mar.

       Si bien durante el desarrollo de la Operación Rosario , concretada el 2 de abril, las Fuerzas de Tareas 40 y 20 contaron con la cobertura –lejana- del Buque Tanque ARA Punta Médanos, no participaron de la misma otros buques similares de empresas del Estado como Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) debido al secreto a que estuvo sometida dicha operación.

       Sin embargo, y a medida que se fueron desarrollando los acontecimientos y el Comité Militar fue avanzando en la colaboración de nuevos planes y el  Comando de la Armada , recurrió, sin movilización previa, a requerir, además de otros petroleros de su Flota, la cooperación de buques tanque a YPF.

       Dentro de los planes que afectaban a la Flota de Mar, a partir del 9 de abril, se formó la Fuerza de Tareas 79-FT 79 que fue comandada por el Contralmirante, Walter O. Allara.

       Esta Fuerza de Tareas constituida el 15 de abril, estuvo compuesta por tres Grupos. El primero (GT 79.1) nucleado en torno al Portaaviones ARA 25 de mayo estuvo integrado, además del componente aeronaval, por tres corbetas y un destructor. El segundo Grupo (GT 79.2) se compuso con cinco destructores y por último, el GT 79.3, cuyo elemento principal lo constituyó el Crucero ARA General Belgrano que tuvo asignados dos destructores. La fuerza contó, además, entre sus unidades agregadas, (buques hospital, Avisos) con tres buques tanques (“BT”), dos de YPF, (Puerto Rosales y Campo Duran) y una de la Armada, (Punta Médanos), éste último al mando del Capitán de Fragata D. Iván J. Cohen.

      El caso de los tanqueros Puerto Rosales y Campo Duran, tuvo mucho con ver con un cierto sentido de la previsión con que algunos mandos navales se anticiparon a los acontecimientos que luego sorprenderían a todos. Estos barcos adquiridos pocos años antes en un astillero italiano, habían sido comprados por YPF con intervención de la Armada Argentina para adaptarlos y destinarlos en un momento determinado a servicios de reabastecimiento de la Flota de Mar. Fue así que sus tripulaciones rigurosamente seleccionadas contaron con una eficaz capacitación teórica práctica cuyos resultados se evaluaban permanentemente en las diversas maniobras a que eran integrados. Para el desarrollo eficiente de esas difíciles operaciones de trasvasamientos de líquidos (combustible o agua) con barcos en plena navegación, con buen o mal tiempo, de día o de noche y bajo la permanente amenaza de los submarinos enemigos los tanqueros fueron provistos de los más modernos elementos. Guinches de última generación, filtros especiales, bombas sumergibles para agua dulce, mangueras reforzadas, embudos ganchos disparadores para cortes imprevistos del suministro y todo un arsenal de herramientas con que los técnicos reparaban “in situ” cualquier deficiencia, otorgaron a esos buques una operatividad que asombraba por su eficiencia y precisión.

       El diagrama de la FT 79 donde cumplieron su misión los buques tanques a partir del 24 de abril fue el siguiente:

       GRUPO DE TAREAS – GT 79.1
         Portaaviones ARA 25 de Mayo
         Grupo Aeronaval Embarcado
         Tres Corbetas (hasta el 30/4)
         Destructor Santísima Trinidad (reemplazada por ARA Hércules el 30-4
         Petrolero BT Campo Duran “YPF”


       GRUPO DE TAREAS – GT 79. 2
             5 Destructores
            Petrolero ARA Punta Médanos

      GRUPO DE TAREAS – GT 79. 3
            Crucero General Belgrano
             Destructor ARA Piedra Buena
            Destructor ARA Bouchard
           Petrolero BT Puerto Rosales YPF

      GRUPO DE TAREAS – GT 79. 4 (A partir del 30 –4)
        Corbeta ARA Drummond
            Corbeta ARA  Guerrico
            Corbeta ARA Granville
            Petrolero BT Punta Médanos

      UNIDADES AGREGADAS
            Buque Hospital  Bahía Paraíso
            BDT ARA Cabo San Antonio
            Aviso ARA Alférez Sobral
            Aviso ARA Comodoro Somellera

            Rompehielos ARA Almirante Irizar


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